Scala News

lunes, 20 de febrero de 2012

A ti que dudas


A ti que dudas, que no te asalten las sombras en la noche del mañana; a ti que dudas que no te ahogue el vacío de la nada, cuando mirando a popa no distingas ya la estela de tu propia vida y confundas la espuma de las olas con la salobre frialdad de tus lágrimas.

A ti que dudas ahora, que no perdure tu duda eternamente, porque con el paso del tiempo quedará sin respuesta y el eco sonará incesante, despierto, dormido, sólo o en el ruido del mundo. El eco te acompañará a cada paso, en cada conversación escucharás de fondo la misma palabra: tu nombre.

Las dudas no se resuelven ni huyendo hacia adelante ni escondiéndote en las brumas de lo que sabes que no te satisface.

Ten valor para afrontarlo; ten valor para responderte a ti mismo. Porque solamente encarando tu nombre despejarás los miedos, resolverás las dudas, disiparás las nubes y verás con claridad el horizonte. La duda no es la respuesta en sí misma; la respuesta está justo al otro lado y para conocerla hay que cruzar la línea. Sólo eso. No siempre se encuentra lo previsto, pero sea lo que sea lo que aparezca habrás abierto el camino de la madurez. Habrás acallado para siempre el grito ahogado de la incertidumbre.

Todo lo demás son parches, tiritas sobre lo que con toda seguridad se convertirá en una herida que acabará supurando con los años.

Despejar esa incógnita es abrazar la posibilidad de ser realmente feliz; algo que no cabe aplazar. Y para ello no estás sólo, estás rodeado de manos, de hombros, de corazones. Si algo tienes cierto es que no estás sólo. Lo sabes; si algo tienes realmente cierto en esta vida es que le tienes a Él.

2 comentarios:

  1. Muy, pero que MUY bonito.

    Un abrazo

    javier

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  2. Que bonito, y que talento tan desperdiciado total con 30 minutos que le dedicaras al dia teniamos un libro publicado o dos o tres. besos

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